La Bandera.

Esta semana ha pasado algo que me ha llamado mucho la atención, específicamente el día 24 de Julio, que acá en Venezuela es día feriado por celebrarse el natalicio de nuestro libertador Simón Bolívar, aparte de celebrarse el día de la Armada Venezolana en honor a la batalla que se libro en el Lago de Maracaibo el 24 de julio de 1813. Los actos en honor a estos dos acontecimientos fueron realizados en un sitio en el cual no tenia referencia de que hayan hecho anteriormente, ya que esta vez se realizaron en Cumana, donde hubo una demostración de operativos conjuntos entra los componentes armada y aviación, y el no faltante discurso del presidente de la república.

Pero realmente no quiero hablar sobre lo que paso en el desfile o lo que no paso, agregando que me costó verlo de hecho no pude verlo completo, ya que mi mama no le agrada escuchar la voz del presidente y verlo en televisión menos, por lo que me quito el control de televisor para que no siguiera viendo el desfile, lo que produjo que no lo viera todo. Realmente de lo que quiero hablar es de algo que observe cuando salí ese día con mis padres, y es que acá en Venezuela, no tengo referencia de otros países, pero se tenía acostumbrado por honor a los días patrios de que se pusiera la bandera en las casas, en honor y respeto a lo que en ese día se estaba celebrando, pero me he llevado una gran sorpresa a que en muy pero muy pocas casas vi la bandera puesta en una ventana o en un sitio donde se viera, de hecho y no quiero sonar como exagerado pero vi como diez casas con la bandera puesta en sus porche cuando mucho. Acotando que en mi casa no había bandera tampoco, le pregunte a mi papa si teníamos una para ponerla y me dijo que nosotros no teníamos bandera en la casa.

Ese hecho me hizo pensar y reflexionar sobre algunas cosas, ya que para mí la bandera es un símbolo patrio, que nos hace referencia a nuestra nacionalidad la de ser “venezolanos”, que es única ya que solo es la BANDERA DE VENEZUELA, con sus tres franjas de color amarillo, azul y rojo, agregando su escudo único. Con una historia que comenzó con la llegada de nuestra primera bandera en manos de Francisco de Miranda por la vela de Coro que ha pasado por un camino de modificaciones en su historia, para tener la ultima hace unos años atrás, agregándosele una estrella más y se cambio el modelo del caballo, por uno viendo y corriendo hacia la derecha si se ve el escudo de frente.

Es un símbolo que te da una identificación como venezolano, pero que ha pasado en los últimos años, que se ha perdido esa costumbre y respeto por los símbolos, en particular este por la bandera, me acuerdo yo que cuando era más pequeño, la cantidad de casas con su bandera puesta en el porche, eran muchas en relación a las de hoy en día, que prácticamente son pocas. Es algo que para mí me llama la atención, no digo que todos debemos ponerla porque sea “algo obligatorio” que no lo es, pero si antes se ponía porque ha venido decreciendo esa costumbre, ese amor por la bandera.

Si nos encontramos con un presidente que aparte de cantar, echar anécdotas de su vida, (agregando la ultima que dijo en la sesión especial en la asamblea nacional este 25 de julio, aludiendo que tenía dos gallos en Miraflores y uno se le había perdido), que hecha chiste, que hace propagandas a productos (véase uvita o la del celular que el dio por sobrenombre “el vergatario”) y que a cada rato en sus cadenas habla sobre los hechos históricos, nos recuerda a cada rato nuestros libertadores, y aparte nos recuerda lo patriota y nacionalista que somos los venezolanos a cada rato.

Pero si somos tan nacionalista, como me explico yo, que la gente no ponga un símbolo tan importante en la ventana de su casa, el día que nuestro Libertador nació, que es algo que indudablemente tenemos que agradecer, porque no conozco a nadie hasta lo momento lo que haya hecho el, pero con todo y eso en su día, no se le da un respeto en su honor, es ahí donde la palabra “respeto” entra en mi mente, para pensar que han sido diez años, donde las banderas y los símbolos patrios, han pasado al plano, de ser usados solo en protestas y marchas, algunas para ser quemadas, otras para ser volteadas(esto se hace, con el significado, de que se necesita ayuda o socorro), otras para ser llevada en la mano guindada en un palo, otros para hacer dinero en las marchas vendiendo las banderas, otros para mezclarlas con banderas de otros países, y así en una lista muy larga.

Es aquí donde pienso que el respeto, se ha perdido lentamente, pero también me hace pensar que el sentimiento nacional, no es tan general como lo hace ver el presidente, es escaso verlo, si lo tomo yo, por lo de la banderas en las casas, han sido diez años donde se han desvirtuado el uso real de esos símbolos, para solo pasar a un plano donde solo es utilizado con un fin de utilidad de política, cosa con la que no estoy de acuerdo, porque esa bandera no es cualquier cosa, porque para tenerla muchos hombres dieron su vida por ella, en muchas batallas en nuestra historia, para defender el derecho de que fuéramos una nación independiente y así tener el privilegio de poder ondear esa bandera, que era “LA BANDERA DE VENEZUELA”, no cualquier paño de limpieza de una cocina.

P.D: me incluyo en la perdida del respeto hacia los simbolos patrios.